Durante la mesa de análisis sobre la reforma energética, los políticos coincidieron en que hubo acciones del gobierno que provocaron el debilitamiento de la paraestatal, particularmente en el área petroquímica.
Francisco Labastida, Manuel Bartlett y Juan Bueno Torio coincidieron con lo dicho por Cuauhtémoc Cárdenas respecto a que el debilitamiento de Petróleos Mexicanos (Pemex) fue producto de actos deliberados, al reconocer que el gobierno mexicano se enfocó en mantener la producción petrolera y dejó de lado las otras áreas de Pemex.
No obstante, mientras que Bartlett opinó que ese “abandono y descuido” se resuelve sin tener que involucrar a empresas extranjeras, Labastida y Bueno Torio consideraron que es necesaria la participación de empresas extranjeras “en algunos temas”.
Bueno Torio, diputado panista y ex director de Pemex Refinación, responsabilizó a la Secretaría de Hacienda del debilitamiento en el área de Petroquímica, que prefirió darle mayor valor a la producción de gas que usarlo para detonar la petroquímica.
Labastida, quien fue secretario de Energía y de Gobernación durante los gobiernos priistas, agregó que hubo un aumento artificial del costo del gas lo que encareció la producción de petroquímicos y fertilizantes hasta hacerla inviable.
El senador por el Partido del Trabajo, Bartlett, consideró que la “destrucción deliberada” de Pemex ha ocurrido porque dentro de la paraestatal, una empresa subsidiaria le vende caro a la otra para que no sea productiva.
Empresas privadas en Pemex
Durante la mesa de análisis sobre la reforma energética, en Noticias MVS primera emisión, los tres políticos también fijaron su postura respecto a la eventual participación de firmas extranjeras en las tareas nodales de la paraestatal mexicana.
Al respecto Bartlett señaló que si bien en el discurso del actual gobierno no se habla de privatización de Pemex, permitir que empresas trasnacionales participen en la explotación del petróleo implicaría privatizar la renta petrolera.
Bueno Torio consideró que la incursión de compañías petroleras extranjeras no significa que Pemex se privatice, y refirió que actualmente Pemex tiene sociedades con esas empresas en el extranjero y cuestionó que se haga de ese modo en lugar de crear empresas privadas en el país.
Labastida también apuntó que las empresas privadas le han hecho trabajos a Pemex “desde siempre” y advirtió que en Estados Unidos la producción de petróleo y gas está creciendo, lo que podría llevar a México a convertirse en un deficitario productor de energía.
Periodismo, por trabajo de mayor interés nacional, por su libro “Camisas azules manos negras.
Reestructuración organizacional
Manuel Bartlett reiteró que Enrique Peña Nieto dice que va a transforma Pemex, pero en realidad lo que se busca es la asociación con empresa extranjeras.
Al hacer referencia a un funcionario estadunidense, Bartlett aludió que Estado Unidos ha dicho que necesita la reforma petrolera, porque necesita el envío de un millón y medio de barriles diarios.
Por su parte, Labastida consideró “poco válida” la versión del funcionario citado por Bartlett, y en su lugar señaló que Pemex requiere una restructuración organizacional, que agilice los trámites para la extracción, donde las decisiones sean tomadas por el Consejo de Administración.
Bueno Torio reconoció que el país no se desestabilizará si no hay una reforma al sector petrolero. Argumentó que la economía del país tiene índices muy sólidos. Pero, planteó que es necesario utilizar la palanca del sector de la energía, “hay que meterle más recursos”, para elevar la economía del país.
Reforma: “Trampa” o “palanca” económica
Bartlett calificó la reforma como una trampa y se refirió a peña Nieto, cuando señala que “vamos a necesitar la participación de las empresas extranjeras, porque si no, nos vamos a convertir en importadores”.
Y replicó que “Pemex no necesita ningún recurso externo, es toda una maniobra para meter a las empresas extranjeras”. Replicó que a Estados Unidos sí le interesa el petróleo mexicano, porque somos el tercer exportador de petróleo.
Bueno Torio recalcó que es necesaria una restructura a la paraestatal, en lo que se refiere a la autonomía de gestión, con libertad de asociarse con otras empresas.
Juan Bueno Torio consideró que las reformas hacendaria y de Pemex deben irse discutiendo a la par. Y propuso que debe diferenciarse el pago de Pemex a la nación cuando la extracción sea en aguas profundas o cuando se realice en tierra firme.
Y reiteró que su partido (PAN) está abierto a las propuestas, no quiere privatizar, “sólo queremos que a energía sea un palanca para la economía del país”. Y descartó que Estados Unidos “se esté muriendo” por nuestro petróleo, “somos un exportador muy pequeño”.
Al señalar que en México sólo se ha extraído el 16% de los hidrocarburos que se han localizado, Labastida explicó que es necesaria la inclusión de tecnología de punta en la industria petrolera.
