Washington.- La actriz Kate del Castillo manifiesta que sigue vigente el proyecto de filmar una película sobre la vida del narcotraficante Joaquín “El Chapo” Guzmán, revela la revista estadunidense The New Yorker, que entrevistó a la mexicana.
“Hago cosas sin medir la consecuencias”, declaró Del Castillo a Robert Draper, quien la entrevistó en Los Ángeles, California, para The New Yorker, que publicó esta semana en su página de Internet un extenso texto sobre la protagonista de la telenovela “La Reina del Sur”.
Tras tres días de pláticas en la casa de la actriz en el exclusivo barrio de Brentwood, California, Draper concluye que en ocasiones Kate parece lamentar su relación con el narcotraficante.
“En varias ocasiones enfatizó que condena la criminalidad de El Chapo. Pero también hizo eco de una afinidad con él”, escribe Draper, en la primera entrevista que ofrece Del Castillo a un medio de comunicación tras el escándalo que desató su reunión con el narcotraficante, en la que fue acompañada por el actor estadunidense Sean Penn y dos productores argentinos.
El 8 de enero de este año en Los Mochis, Sinaloa, el gobierno de México recapturó por segunda ocasión a “El Chapo”, quien se había fugado el 11 de julio de 2015 de la prisión de Alta Seguridad del Altiplano, por medio de un túnel de unos 1500 metros de longitud.
Días después de la espectacular fuga del narcotraficante, la revista estadunidense Rolling Stone en su página de la Internet publicó la entrevista que Penn hizo a “El Chapo”, en la que el actor da cuenta que el contacto se logró gracias a los oficios de Kate.
Tras conocerse la entrevista de “El Chapo” con Penn y de la presencia de Kate en el famoso encuentro en la sierra de Sinaloa, la Procuraduría General de la Republica, por medio de su titular, Arely Gómez, indicó que investigaba a la actriz por posibles delitos relacionadas al lavado de dinero.
El gobierno de México, como indica The New Yorker, filtró al periódico El Universal el intercambio de mensajes telefónicos que mantuvieron “El Chapo” y Del Castillo, previos y posteriores a su reunión, para sustentar una presunta investigación contra la actriz; basada en la empresa que destila el tequila “Honor del Castillo”, registrada en los Estados Unidos y de la que es socia Del Castillo.
“Es una cacería de brujas”, le dijo la actriz mexicana a The New Yorker respecto al argumento del gobierno mexicano.
La revista estadunidense explica que los mensajes telefónicos entre Del Castillo y El Chapo se hicieron a través de un teléfono celular Black Berry que los abogados del narcotraficante le dieron a la actriz; y no del teléfono personal de la protagonista de Teresa, la narcotraficante de la telenovela La Reina del Sur; como algunos medios mexicanos han publicado.
Con su entrevistador, Kate se queja de que la prensa mexicana tiene tintes sexistas al hablar de su caso: “Siempre mencionan mi edad (43 años). No hablan de la edad de Penn, ni que él está enamorado o que admira a El Chapo”, declaró Del Castillo en referencia a lo que de ella se publica la prensa mexicana.
The New Yorker anotó que pese a sus denuncias, la actriz mexicana tiene mucho cuidado en hacerse de enemigos en la industria cinematográfica estadunidense de Hollywood.
“Le preocupa que Penn, (Fernando) Sulichin e (José) Ibáñez –los productores argentinos- de alguna manera la hayan expuesto cuando no insistieron en incluirla como periodista en la carta que Jan Wenner (director editorial de Rolling Stone) dio a Penn”, se lee en la amplia entrevista de The New Yorker.
Del Castillo da cuenta con detalle sobre cómo se iniciaron su contactos con “El Chapo” por medio de los abogados del narcotraficante, hechos de los cuales ya dio amplia cobertura en la prensa de México. No obstante, la actriz revela que después de que la Procuradora mexicana la mencionara a ella como parte de una investigación criminal, se encerró en su casa de California durante dos semanas para evitar a la prensa y a los fotógrafos.
En su entrevista con The New Yorker, Del Castillo aclara que Penn nunca le dijo -antes de la reunión con El Chapo- que pretendía escribir la entrevista para Rolling Stone. La actriz mexicana insiste que en ella creía que todo era parte de un proyecto para producir una película sobre la vida de Guzmán Loera.
Kate incluso le aclara a Draper que algunos fragmentos de la narración que escribió Penn para Rolling Stone nunca ocurrieron.
Por ejemplo, niega que en su recorrido en automóvil por caminos de tercería en la Sierra de Sinaloa para llegar al encuentro con Guzmán Loera hayan pasado por un retén militar donde los soldados saludaron a Alfredo (hijo del Chapo, quien iba en el vehículo junto con la actriz y el actor) y los dejaron pasar sin interrogarlos o registrarlos, como lo describió Penn.
“Esta escena, insiste Del Castillo; no ocurrió. No pasaron por ningún retén militar ni mucho menos que los soldados simplemente los saludaran. Sulichin e Ibáñez, quienes iban en otro auto adelante del de Penn y Del Castillo, no recuerdan haber pasado por un retén militar (Penn mantiene que su versión es correcta)”, escribió Draper.
Antes de la recaptura de El Chapo y de la publicación de la entrevista de Penn con el narcotraficante, y por consejo del propio actor estadunidense, Del Castillo confesó a The New Yorker que buscó al abogado mexicano Alonso Aguilar Zinser, a quien le contó lo del encuentro con Guzmán Loera.
Fue el 19 de diciembre de 2015 cuando la actriz mexicana se comunicó por teléfono con Aguilar Zinser. The New Yorker apunta que de acuerdo con Kate, en esa conversación el abogado mexicano le dijo a la actriz que no creía que ella había incurrido en ningún ilícito en su encuentro con “El Chapo”.
“Pero el jueves 7 de enero (un día antes de la segunda recaptura de Guzmán Loera) Aguilar Zinser le comunicó (a Kate) que no tomaría el caso, citando un problema de conflicto de interés por otros clientes que el tenia”, resalta The New Yorker.
Después un par de meses del escándalo por la recaptura y la entrevista de Guzmán Loera con Kate y Penn, la actriz mexicana no ha sido acusada formalmente de ningún delito, ni en México ni en los Estados Unidos. Pero la actriz acotó a su entrevistador que permanece en California por razones de seguridad y que por ahora no tiene intenciones de viajar a México por temor a que la arresten las autoridades.
“Ella, aparentemente sigue contando con el respaldo de El Chapo. El mes pasado, uno de los abogados del narcotraficante dijo a la agencia de noticias Associated Press: ‘Yo se que Kate es la representante del señor Joaquín Guzmán… y el me dijo el lunes que el proyecto de la película sigue vigente”, concluye Draper.
Fuente: Proceso| R J. JESÚS ESQUIVEL