La Comisión Federal de Electricidad (CFE) “hace que los usuarios paguen tarifas más elevadas por el servicio, ya que ha desaparecido, de modo paulatino, parte de los subsidios al costo de la luz; retira de operación plantas antiguas en perfecto estado, que tenían bajo costo y eficiencia productiva; las ha vendido como chatarra y sustituido con plantas de ciclo combinado que operan con gas natural importado, que es sumamente caro y eso lo paga la población”.
CFE “ha hecho lo posible para encarecer la electricidad para los usuarios”, señaló en entrevista Martín Esparza, secretario general del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME). Indicó que esto ha generado que se eleve el descontento de la población por el aumento sin medida en el costo del servicio y ha generado una “expansión sin precedente de las organizaciones de usuarios contra las altas tarifas”, quienes en los primeros meses de 2012 se movilizarán.
Esparza indicó que la CFE también ha optado por mantener a un mínimo el funcionamiento de las plantas hidroeléctricas y ha favorecido la generación privada de electricidad con el consiguiente encarecimiento del servicio. Así, desde 2000 la generación de luz por compañías privadas pasó de 484 megavatios a 11 mil 457, es decir, creció 2 mil 367 por ciento, mientras en la CFE creció sólo 7.42 por ciento.
Sostuvo que “hay una obsesiva política neoliberal de favorecer la generación privada de electricidad, por encima de cualquier criterio técnico o financiero y esto arroja un saldo de escandalosos robos a la nación”. Dijo que los contratos de operación otorgados a las trasnacionales ofrecen todas las ventajas y ningún riesgo a los inversionistas, quienes ganan por partida doble, primero por la venta de energía que a México, lo que le cuesta al país 67 mil millones de pesos anuales.
La producción independiente de energía, agregó, es fundamentalmente privada. Las empresas españolas Iberdrola y Unión Fenosa controlan 50 por ciento de la inversión extranjera en el rubro de la electricidad en el país, y la ilegalidad y corrupción con que se conducen es la principal causa del injustificado aumento en las tarifas domésticas, aseguró.
Indicó que es innegable que el proceso de privatización de la industria eléctrica, es causa directa del incremento de tarifas y del enorme descontento de la población por ese motivo, y advirtió que los integrantes del SME manifiestan su rechazo a que “se continúe persiguiendo con saña a las decenas de miles de usuarios que protestan por los abusos cometidos por la empresa de clase mundial”.
Fuente: La Jornada
