Dormund, Alemania.- La Fiscalía federal alemana informó que el ataque con explosivos contra el autobús del equipo alemán de futbol del Borussia Dortmund se investiga como un atentado “terrorista” y que arrestó temporalmente a una persona del “espectro islamista”.
La portavoz de la Fiscalía, Frauke Köhler, confirmó ante los medios de comunicación que en el lugar de los hechos se hallaron tres textos idénticos que apuntan a “un posible trasfondo islamista”, en los que se pide que Alemania retire los aviones Tornado que participan en la misión militar en Siria y el cierre de la base aérea estadounidense de Ramstein (suroeste de Alemania).
Según añadió, en una página de internet de extrema izquierda se reivindicó el ataque, pero los investigadores tienen “dudas considerables” sobre la veracidad de ese mensaje.
Las fuerzas de seguridad tienen en la mira a dos sospechosos del “espectro islamista” y registraron sus viviendas, pero sólo uno fue arrestado temporalmente mientras se estudia si se pide su ingreso a prisión.
El ataque tuvo lugar ayer hacia las 19:15 horas (tiempo local) cuando se registraron tres explosiones al paso del autobús del Borussia Dortmund en su camino al estadio para enfrentarse al Mónaco, en el partido de Ida de Cuartos de Final de la Liga de Campeones.
El futbolista español Marc Bartra resultó herido en un brazo por los cristales rotos, pero Köhler explicó que los daños podían haber resultado mucho más graves.
Los artefactos, que se encontraban detrás de un seto, contenían piezas de metal y una de ellas se incrustó en el cabecero de uno de los asientos del autobús.
El alcance de los explosivos, cuya composición sigue investigándose, superó los cien metros, precisó la portavoz de la Fiscalía.
Por el tipo de ataque, los investigadores asumen que se trata de un atentado con “trasfondo terrorista”, aunque Köhler insistió en que “los motivos concretos no están claros en estos momentos”.
El Ministro del Interior del “Land” de Renania del Norte-Westfalia, Ralf Jäger, advirtió en una intervención anterior que no puede descartar ninguna vía de investigación -incluida la relacionada con hinchas violentos- y recordó que en todo el “Land” se han reforzado de forma permanente los dispositivos de seguridad.
“Vigilamos cada acto público, no solo los multitudinarios”, apuntó el político socialdemócrata, quien aludió a la “situación especial” que se vive en este populoso estado federado del oeste de Alemania.
Jäger recordó, además, que hay que partir de la base de que los autores del ataque contra el autobús siguen libres y probablemente en la región.
La ciudad de Dinslaken y otros puntos de la cuenca del Ruhr, la región tradicionalmente minera donde se encuentra Dortmund, se considera un bastión del salafismo, minoría radical musulmana, que suma unas 10 mil personas en toda Alemania.
En la región se concentran asimismo varios clubes de la Bundesliga -como el Schalke y el Borussia Mönchengladbach-, todos ellos con aficiones muy combativas.
Fuente: Agencia