Andrés Manuel López Obrador, fue el primero en afiliarse. En el Zócalo del Distrito Federal, en la esquina de Madero y Plaza de la Constitución, el ex candidato presidencial de las izquierdas mostró su credencial de elector y junto con el dirigente del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Martí Batres, se dio inicio a una campaña de afiliación que busca 1.5 millones de adeptos.
“Tenemos la necesidad de organizarnos y seguir luchando. No podemos abandonar al pueblo. Tenemos que seguir insistiendo hasta derrocar el régimen, derrotar a la mafia del poder”, dijo López Obrador.
El jueves, anunció, “inicio una gira por todas las regiones de México para participar en las asambleas municipales donde se van a constituir los consejos de Morena. Vamos a seguir llamando a todos los que simpatizan, mujeres y hombres de buena voluntad”.
DECÁLOGO DE AMLO PARA UNIRSE A MORENA
Ayer, en un acto celebrado en el Instituto Federal Electoral (IFE), el presidente del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Martí Batres, entregó la documentación necesaria para iniciar este proceso que exige afiliar a un mínimo de unos 220,000 simpatizantes y celebrar asambleas previstas en el último trimestre de este año.
Martí Batres aseguró que el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) constituye la auténtica oposición y adelantó que luchará por la vía pacífica y electoral para sacar del gobierno al PRI y al PAN.
Antes de la entrega de los documentos, el consejero del IFE Marco Antonio Baños saludó a los militantes izquierdistas congregados en el auditorio de la institución y les dio la bienvenida a la “casa de la democracia” de su país.
Dichas palabras fueron contestadas con silbidos y abucheos por los cientos de militantes que acompañaban a Batres y simpatizan con López Obrador, un crítico feroz de la actuación del IFE en los dos últimos comicios presidenciales, de los que salió derrotado.
“Hemos escogido llegar a 1.5 millones de afiliados en el año 2013″, dijo el político izquierdista, fiel a López Obrador en sus batallas electorales y en los años en que el líder izquierdista mexicano fue alcalde de la capital del país.
Dijo que Morena era “la esperanza de México” y que una vez se constituya formalmente en un nuevo partido representará un proyecto distinto del neoliberal actual, que dejará de lado la privatización de los recursos energéticos y que no exigirá a los ciudadanos más “sacrificio social”.
Fuente: Sin Embargo
