Al ser interrogado sobre los hechos, los dos acusados aceptaron que pretendían ganarse un peso extra.
Dos empleados de la Comisión Federal de Electricidad, fueron sorprendidos por la policía de Escobedo, cuando extorsionaban a varios habitantes de una colonia residencial, a quienes intentaban despojar de dinero por tener los llamados “Changuitos”.
En otros casos le decían a los colonos, que los medidores estaban alterados y que en caso de no pagarles dos mil pesos, los denunciarían para que los multaran con 30 mil pesos.
Los empleados quienes realizaban sus extorsiones los fines de semana, llevaban puestos los uniformes oficiales de la CFE y sus herramientas.
Las autoridades de Escobedo, mencionaron que lo que se les hizo extraño a los afectados, es que estos llegaron en un vehículo particular a realizar los cobros ilegales.
Uno de los detenidos fue identificado como César Cárdenas Sánchez, de 55 años de edad, quien tiene su casa en la calle Laguna Verde, número 205 en la colonia Margarita Salazar en el municipio de San Nicolás.
Mientras que su cómplice fue identificado como Luis Lauro Cárdenas Rodríguez, de 28 años de edad, quien radica en la calle Moctezuma, número 530 en la colonia Hacienda Los Morales de la misma ciudad.
Ambos fueron detenidos en el cruce de las calles Unión y Éboli en la colonia Puerta del Sol en Escobedo.
Los policías preventivos mencionaron que realizaban un recorrido por calles de este sector, cuando vieron que estaban discutiendo unas mujeres con los empleados de la CFE.
Al acercarse al lugar, las afectadas mencionaron que los dos trabajadores de la empresa federal, estaban intentando cobrarles dos mil pesos por no cortarles la luz.
Explicaron que los acusados mencionaron que los enviaron de la central de la CFE, para indicarles que se estaban robando el fluido eléctrico y tenían orden de recogerles el medidor.
Los uniformados solicitaron a los dos trabajadores que mostraran el documento donde la central de la CFE daba la orden de retiro del aparato.
Pero este no fue mostrado por los acusados, por lo cual los uniformados a través del llamado C-4, se enlazaron con la empresa federal, para pedir informes de Cárdenas Sánchez y Cárdenas Rodríguez.
Les indicaron que efectivamente, eran trabajadores de una de las cuadrillas de la CFE; pero que estos no estaban de servicio, pues era su día de descanso.
Al ser interrogado sobre los hechos, los dos acusados aceptaron que pretendían ganarse un peso extra, al presionar aquellas familias que estuvieran colgadas, con “Changuitos” o el medidor alterado.
Los dos implicados quedaron a disposición del Juez calificador en turno, donde se deslindaran responsabilidades.
Fuente: El Porvenir / Sergio Luis Castillo