Su patrimonio era de 39 mil 954 mdp en 2006 y pasó a negativo en 193 mil 919 mdp en 2011
Captó en este gobierno 231 mil 642 millones de dólares, 110 mil mdd más que la deuda externa neta
Los ingresos por exportaciones de crudo acumulados en la saliente administración del presidente Felipe Calderón alcanzaron a octubre de este año 231 mil 642 millones de dólares, monto que superó en más de 110 mil millones de dólares al saldo de la deuda externa neta total del sector público federal, que al cierre de septiembre de 2012 se ubicó en 121 mil 304 millones de dólares, según las cifras más recientes proporcionadas por Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Secretaría de Hacienda (SHCP).
Sin embargo, pese a los ingresos sin precedentes obtenidos por exportaciones de crudo, Pemex registró en el actual sexenio un deterioro constante. Su patrimonio pasó de 39 mil 954 millones de pesos (mdp) al cierre de 2006 a convertirse en negativo en 193 mil 919 millones de pesos al cierre de 2011, según el dato oficial del último año fiscal.
Por su parte, los pasivos totales de la petrolera mexicana, en la que se integran los pasivos laborales, que incluyen las pensiones de los trabajadores que aún no están fondeadas, registró un crecimiento de 58 por ciento al pasar en 2006 de un billón 164 mil 780 millones 692 mil pesos a un billón 845 mil 643 millones 144 mil pesos, al cierre del tercer trimestre de 2012.
Al comienzo del actual sexenio, el aumento en los precios de petróleo fue resultado de la mayor demanda de crudo por parte de países emergentes como Brasil, China e India, así como por la creciente incertidumbre sobre posibles conflictos en Medio Oriente y la continúa volatilidad del dólar.
Estos factores ocasionaron que el precio promedio del crudo de referencia West Texas Intermediate (WTI) estadunidense aumentara de 57.44 dólares por barril en enero de 2007 hasta 91.74 dólares por barril en diciembre del mismo año, para un precio promedio anual de 72.38 dólares.
En el caso del precio del petróleo crudo del Mar del Norte (Brent) repuntó de 53.44 dólares por barril hasta 91.46 dólares, para un incremento de más de 38 dólares en todo 2007 y un precio promedio anual de 72.95 dólares por barril.
Esta alza en los precios de los marcadores internacionales (WTI y Brent) favoreció el precio de la canasta de los crudos mexicanos de exportación, los cuales ascendieron de 45.22 dólares en enero hasta 80.96 dólares por barril en diciembre de 2007 para promediar en ese año 61.64 dólares por barril, por lo que se situó 18.84 dólares por arriba del previsto en la Ley de Ingresos de la Federación de 2007, que fue de 42.80 dólares por barril.
Este comportamiento hizo que la recaudación de ingresos petroleros para ese año fuera mayor en 63 mil 853.4 millones de pesos respecto de 816 mil 844.8 millones previstos en la Ley de Ingresos de 2007. En ese año se captaron divisas por venta de crudo por 37 mil 937 millones de dólares.
En 2008 persistió la tendencia ascendente en los precios del crudo y la mezcla mexicana se ubicó en promedio de 84.38 dólares por barril. Esto significó que se obtuvieran ingresos por un billón 54 mil 626 millones de pesos, que significaron ingresos adicionales por 188 mil 959 millones de pesos respecto de 865 mil 666 millones estimados inicialmente. En 2008 se obtuvieron por exportaciones de crudo 43 mil 342 millones de dólares.
Para 2009 se sobrestimó el precio de la mezcla mexicana de exportación, pero la crisis financiera internacional contrajo la demanda de hidrocarburos por la debilidad de la economía mundial, lo que ocasionó el desplome de los precios del petróleo. En 2009, el precio promedio de la mezcla mexicana de exportación se ubicó en 57.40 dólares por barril, por lo que se situó 12.60 dólares por debajo del estimado para ese año, que era de 70 dólares por barril.
Esto provocó que la recaudación de ingresos petroleros de ese ejercicio fiscal se situara en 874 mil 163.9 millones de pesos, cifra menor en 13.9 por ciento al estimado para ese año de un billón 15 mil 866.9 millones de pesos. Esta situación ocasionó que el gobierno federal hiciera uso del seguro de coberturas petroleras, para mantener un relativo equilibrio en las finanzas públicas. Durante 2009, el monto de las ventas por crudo de exportación fue el menor de todo el sexenio con 25 mil 605 millones de dólares.
Durante 2010 y 2011, los precios del petróleo continuaron al alza, caracterizados por su creciente inestabilidad. En 2010, el precio de la mezcla mexicana de exportación fue de 72.46 dólares por barril. Se captaron por las ventas de crudo al exterior 35 mil 985 millones de dólares, lo que permitió que el gobierno federal obtuviera ingresos adicionales equivalentes en pesos mexicanos a 59 mil 472 millones de pesos.
En 2011, el precio de la mezcla mexicana de exportación se fijó en 89.7 dólares por barril, pero su precio observado fue de 101 dólares por lo que se obtuvieron ingresos extras por 96 mil 721 millones de pesos. El año pasado los recursos obtenidos por ventas al extranjero fueron de 49 mil 322 millones de dólares.
Finalmente, entre enero y octubre de 2012, las ventas de crudo de exportación han representado ingresos por 39 mil 451 millones de dólares. El precio del crudo mexicano se ubica en un promedio de 103.30 dólares por barril, lo que significa un diferencial de 18.40 dólares por barril, con respecto a 84.90 dólares previstos en la Ley de Ingresos de 2012. De esta manera, se han obtenido el equivalente a más de 125 mil millones de pesos adicionales a los previamente presupuestados.
Esto sin considear que la plataforma de exportación promedió entre enero y octubre de 2012 un millón 252 mil barriles diarios, volumen superior al establecido en los Criterios de Política Económica de este año, donde se fijó una meta de un millón 167 mil barriles diarios. Así, las estimaciones más conservadoras son que el actual gobierno, que está por finalizar, obtuvo al menos unos 550 mil millones de pesos en recaudación de ingresos excedentes.
México destina 80 por ciento de sus exportaciones de crudo a Estados Unidos y el restante 20 por ciento se distribuye entre Europa, Canadá, otros países de América Latina y Medio Oriente.
Fuente: La Jornada