El oficialista de Alianza País promete
hacer la tarea que faltapara sacar adelante al país
Guillermo Lasso, el candidato derechista, rechaza el resultado y llama a la protesta pacífica
La diferencia entre ambos aspirantes fue de 212 mil sufragios, de acuerdo con cifras del CNE
Quito. El candidato oficialista y ex vicepresidente Lenín Moreno se impuso con 51.11 por ciento de votos al empresario derechista Guillermo Lasso, quien obtuvo 48.89 por ciento, en la segunda vuelta de la elección presidencial celebrada en Ecuador este domingo, anunció por la noche el Consejo Nacional Electoral (CNE) con 95.5 por ciento de votos escrutados.
Horas antes de que el CNE diera por vencedor a Moreno, candidato de Alianza País, con una diferencia de 212 mil votos, ambos candidatos habían proclamado su victoria ante miles de simpatizantes. Sondeos a boca de urnas dados a conocer tras el cierre de las votaciones vaticinaron la victoria de los dos postulantes, lo que generó incertidumbre a lo largo de la tarde.
Lasso, de la coalición CREO-Suma, rechazó los resultados y advirtió que los delegados de su partido presentarán objeciones en todas las provincias del país debido a que no coinciden las actas originales con las cifras del CNE; indicó que se puso en contacto con el secretario de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro.
“Actuemos de manera pacífica, pero firme, en nuestra protesta que es legítima en democracia, y vamos a decir: ‘no me robes el voto’ porque queremos un cambio en Ecuador”, afirmó Lasso en rueda de prensa. Y dirigiéndose al mandatario saliente, Rafael Correa, advirtió:
no juegue con fuego... aquí hay gente que no le ha tenido miedo, que lo segurirá enfrentando, no juegue con el pueblo.
Casi al mismo tiempo, miles de enardecidos seguidores de Lasso tumbaron vallas metálicas y llegaron casi al pie de la sede del Consejo Nacional Electoral, en el norte capitalino, mientras decenas de policías trataban de contener la avalancha en medio de golpes, empujones y ánimos crispados.
¡Fraude, fraude!, era el grito de este grupo, mientras del otro lado, a unas cuatro cuadras, cientos de personas que apoyan a Moreno bailaban y cantaban:
¡Sufre, Lasso, sufre!,
¡Llora, banquero, llora!
También se reportaron incidentes en el puerto de Guayaquil, donde el candidato Lasso aguardó los resultados oficiales.
A las 8:30 de la noche el presidente del CNE, Juan Pablo Pozo, comenzó a divulgar boletines con los resultados. Ecuador, indicó,
merece la responsabilidad ética de sus actores políticos de reconocer la decisión democrática del pueblo en las urnas. El pueblo se pronunció en paz y con respeto al orden público. Es importante que hoy respetemos a la ciudadanía. Aquí ni se ha regalado ni se ha quitado un solo voto a nadie.
Alrededor de las 8 de la noche, en un conteo rápido la institución Participación Ciudadana aseguró que había un empate técnico, con diferencia de 0.6 por ciento de sufragios.
Una hora antes, Moreno se proclamó ganador.
Tenemos datos completamente certeros. ¡Hemos ganado las elecciones!, gritó ante una multitud de partidarios reunidos en un hotel de la capital.
Moreno, de 64 años, con paraplejia desde 1998 luego de recibir un disparo en un asalto, y quien acompañó al presidente Rafael Correa en la vicepresidencia desde su asunción en 2007 hasta 2013, prometió con Alianza País:
vamos a seguir construyendo el camino, se ha hecho mucho, pero nos toca la tarea que falta por hacer.
Su trabajo por las personas con discapacidad en Ecuador lo proyectó a Ginebra para desempeñarse de enviado especial del secretario de la Organización de Naciones Unidas sobre Discapacidad y Accesibilidad entre 2014 y 2016. En 2012 fue nominado por su trabajo social al premio Nobel de la Paz.
Lasso, de 61 años, y quien quedó en segundo lugar en la primera vuelta celebrada el 19 de febrero, es miembro del Opus Dei, reconocido por llevar al Banco Guayaquil, de su propiedad, a ser uno de los principales de Ecuador con un proyecto de bancarización a microempresarios. Fue ministro de Economía y Energía vinculado al gobierno de Jamil Mahuad, en cuyo mandato se desató la crisis de 1999, y ha sido muy crítico de la gestión de Correa.
El presidente, que debe entregar el poder el 24 de mayo después de más de 10 años de gobierno, había calificado de decisivo el resultado para la izquierda en su país, y para la derecha en América Latina, ante la reciente
reacción conservadoraque se vive en algunos países de la región.
Un total de 12 millones 800 mil electores fueron convocados a las urnas; votaron 9 millones 440, según cifras proporcionadas por el CNE.
Más de 378 mil ecuatorianos estaban autorizados a sufragar en el exterior. El voto en Ecuador es obligatorio para los ciudadanos de entre 18 y 65 años. La abstención genera una multa de 37.50 dólares, y ocho dólares adicionales por la papeleta electoral.
Cuatro misiones de observadores electorales estuvieron presentes en la jornada: la OEA, la Unión de Naciones Sudamericanas, la Unión Interamericana de Organismos Electorales y la Asociación Mundial de Organismos Electorales.
Fuente: La Jornada