El antimonumento en memoria de los 43 normalistas de Ayotzinapa.
Foto: Alejandro Saldívar
En el escalón de la banqueta se colocó además una placa de metal en la que se puede leer: “Porque vivos se los llevaron, vivos los queremos”, uno de los lemas emblemáticos de la movilización social por los normalistas desaparecidos de Ayotzinapa.
Ciudadanos instalaron esta tarde la obra del Comité +43 -organismo de la sociedad civil- en la esquina de Reforma y avenida Juárez, para conmemorar los siete meses de la actuación criminal de la policía en Iguala la noche del pasado 26 de septiembre.
Tras excavar en el camellón del Paseo de la Reforma, a nivel de la Esquina de la Información y enfrente de la Torre del Caballito, los ciudadanos amarraron los pesados números en una base de metal.
Luego, entre los aplausos de las decenas de personas presentes y las consignas de “¡Fuera Peña!”, los ciudadanos terminaron la instalación y rellenaron el hueco de tierra.
Según integrantes del Comité +43, el chofer que transportó la obra al lugar fue detenido posteriormente mientras se dirigía a la avenida Insurgentes.
La obra se inauguró con un recuento hasta el número 43 que terminó con el grito de “Justicia”.
Padres de normalistas declararon que el número 43 significa para ellos “la lucha por encontrarlos con vida”.
“Este número es de resistencia y debemos seguir en pie de lucha para que lo que ocurrió en Iguala no quede en el olvido”, declaró un vocero de los familiares.
Y responsabilizó al Gobierno del Distrito Federal de cualquier intento de remover al “antimonumento”.
“No nos abandonen”, exhortó la madre de Benjamín Ascencio Bautisto al pedir “que los que tienen hijos nos sigan acompañando”.
Siendo las 4:42 horas de este 26 de abril del 2015 se inauguró oficialmente el “antimonumento”.
“Es un acto de dignidad y un llamado a la justicia”, comentó uno de los instaladores de la obra, “para que no se sigan cometiendo actos de lesa humanidad en este país”.
Se torna violenta marcha por Ayotzinapa; apedrean Congreso y queman vehículos
CHILPANCINGO, Gro.- La marcha realizada en esta capital para exigir justicia, a siete meses de la masacre y desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, se tornó violenta hace unos momentos al registrarse enfrentamientos de manifestantes con elementos policiacos.
Las personas que participaban en la marcha arremetieron con piedras contra la sede del Congreso del Estado y derribaron los portones, utilizando vehículos de empresas como Bimbo y Lala los cuales luego fueron incendiados en el mismo lugar.
Minutos después arribaron policías estatales con equipo antimotín y dispersaron la manifestación con gas lacrimógeno.
Esto provocó que se caldearan aún más los ánimos: los normalistas respondieron con piedras en contra de los uniformados y se desató una trifulca que se prolongó por unos 10 minutos.
Posteriormente los manifestantes se replegaron por distintas calles de la capital rumbo al zócalo capitalino.
En la marcha participaban integrantes del Movimiento Popular de Guerrero (MPG) para exigir justicia a siete meses de la masacre y desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa.
La protesta era encabezada por los padres de los 43 estudiantes desaparecidos, miembros del magisterio disidente, organizaciones sociales y normalistas.
A las 12:30 horas, el contingente partió de la parte norte de la ciudad y avanzó de manera pacífica al sur sobre la calle Benito Juárez.
Los manifestantes lanzaron consignas contra los políticos ligados a la delincuencia y reiteraron su advertencia de boicotear las elecciones.
También realizaron pintas en bardas y paredes donde plasmaron mensajes para seguir insistiendo en su demanda de justicia por el caso Ayotzinapa, trágico hecho que exhibió el grado de infiltración del narco en la esfera política y gubernamental en la entidad.