miércoles, 14 de noviembre de 2012

Sanear Pemex para abrirla al capital privado, plantea su director

Su pasivo de 143 mil 606 mdd representa 92.7% del valor de sus activos, indica reporte

A la petrolera le falta más inversión y flexibilidad para operar como empresa, según Suárez Coppel

La paraestatal ya fondea dos terceras partes de sus requerimientos de inversión anual

El director de Petróleos Mexicanos (Pemex), Juan José Suárez Coppel, planteó que sólo a partir de un saneamiento financiero por parte del gobierno federal esa paraestatal estaría en condiciones de ser abierta al capital privado y satisfacer las necesidades de inversión que se requieren para aumentar la producción.

Señaló que la paraestatal ya fondea dos terceras partes de sus requerimientos de inversión anual, unos 15 mil millones de dólares, en los mercados financieros a través de deuda o colocación de bonos.

De acuerdo con cifras de su último reporte de resultados financieros, Pemex arrastra un pasivo calculado en un billón 845 mil 643 millones de pesos (unos 143 mil 606 millones de dólares), lo que representa 92.7 por ciento del valor total de sus activos valorados en un billón 990 mil 686 millones de pesos (154 mil 892 millones de dólares).

Respecto de la participación privada en el sector energético, Suárez Coppel afirmó que no les preocupa la competencia, aunque sí la forma de operar, porque si alguna compañía operase como nosotros, le iría igual de mal.

La apertura, dijo, podría comenzar con dar autonomía a Pemex para encaminarla hacia un escenario de competencia en el mercado. A Pemex, añadió, le falta más inversión y flexibilidad para operar como empresa. Si como país no podemos destinarle los suficientes recursos, como mexicano me encantaría poder invertir en Pemex para tener parte de los rendimientos que genere.

Modelo de Saudi Aramco

Más tarde y por separado, pero en el mismo foro Petróleo y Energía, al que asistieron como ponentes, el secretario de Energía, Jordy Herrera Flores dijo que la apertura de la petrolera a la inversión privada permitiría mejorar su rentabilidad, sin que el Estado necesariamente pierda el control de la empresa.

Comentó que en su opinión el modelo de la petrolera árabe Saudi Aramco da al gobierno más capacidad de decisión que con otros modelos, como los que se aplicaron en Petrobras y Statoil.

Desde su punto de vista una nueva reforma energética en materia petrolera puede considerar la intervención privada a través de contratos de participación en áreas como refinación, petroquímica, transporte y almacenamiento de petrolíferos, así como la explotación del gas shale o gas lutita. Esto le daría mayor rentabilidad a Pemex, afirmó el funcionario.

Entre ir a una reforma donde se permita una inversión simplemente de capitales a una empresa estatal, o bien tener mejores controles con autonomía y permitir en áreas no estratégicas la participación de privados, me inclino más por ese modelo, declaró en entrevista luego de su participación como orador en el tercer foro Petróleo y Energía.

Pemex necesita dotarse de recursos, de un mandato claro y de menos burocracia; es necesario permitirle un manejo como empresa con autogestión, con un consejo de administración asambleísta y con libertad de presupuesto, puntualizó.

Remarcó: necesitamos una reforma energética para dar competitividad al país, para tener el gas más barato del mundo, para generar energía eléctrica proveniente del gas y desarrollar la petroquímica. El sector energético está sufriendo una revolución. Se trata de cómo debemos aprovechar la riqueza de recursos de hidrocarburos, sea convencional o no convencional, para seguir con el proceso de transición energética, para que a mediados del siglo XXI podamos tener un sector energético sustentable, eficiente y que brinde al país bienes públicos a favor de los mexicanos.



Empresarios mexicanos tienen capacidad para entrar en los proyectos energéticos


Podemos sumar esfuerzos con extranjeros, dice Hank González

Querétaro, Qro. Empresarios mexicanos tienen capacidad para participar con capital en proyectos en el sector energético, aseguró Carlos Hank González, director general del Grupo Financiero Interacciones y del constructor Grupo Industrial Hermes.

También hay grupos mexicanos que pueden participar en áreas relacionadas con el sector energético, respondió Hank González al ser interrogado sobre el interés de empresas internacionales por la industria petrolera mexicana, una vez que el próximo gobierno anticipó una reforma para abrir algunas áreas de esta actividad al capital privado.

No sólo hay interés nuestro, sino que además hay muchos grupos mexicanos que tienen el potencial y la capacidad de hacerlo y podemos sumar haciéndolo con los grupos extranjeros, declaró, al ser entrevistado en el contexto de la décima edición del foro México, cumbre de negocios.

En los siguientes años en México se abren oportunidades muy importantes para la inversión en infraestructura en general, aseguró el empresario. Simplemente para mantenerse competitivo el país, para ser productivo y seguir creciendo al mismo ritmo de ahora se requiere inversión en infraestructura que equivalga a por lo menos 5 por ciento del producto interno bruto al año, consideró.

Según datos oficiales, en México la inversión en infraestructura fue, en promedio, de 5.4 por ciento del PIB. Un punto del producto equivale a 140 mil millones de pesos actualmente.

Hank González planteó que niveles de inversión al menos de 6 a 7 por ciento del PIB son indispensables para que se pueda empezar la recuperación.

La oportunidad que se ve en infraestructura es impresionante porque se requiere esa inversión y el presidente (electo, Enrique) Peña Nieto lo tiene muy claro. Vemos enormes oportunidades en ese sentido, comentó.

Interacciones y Hermes actúan respectivamente en la parte financiera y en la industrial, en la construcción de obras de infraestructura. Es un área en la que el país requiere de todo, expuso Hank González.

Las necesidades del país en materia de infraestructura, abundó, pasan por carreteras, aeropuertos, puertos, escuelas, hospitales, generación de energía o presas. Entonces, la necesidad de inversión en infraestructura no es una coincidencia de hoy, sino que es constante. Estamos entusiasmados del potencial que puede tener, añadió.




Fuente: La Jornada