Pese a que México abrió sus puertas a la competencia en el mercado gasolinero y pasó del control del 100 por ciento de las gasolineras al 81.5 por ciento, los consumidores no han visto una mejora en sus bolsillos.
Actualmente hay 33 empresas, nacionales y extranjeras, petroleras como BP, Shell, Exxon-Mobil, Total, Gulf, Hidrosina, Oxxo Gas, entre muchas otras, sin embargo, las estaciones operadas sólo cambiaron la marca y la imagen, ya que Pemex sigue siendo la única proveedora y la principal operadora de infraestructura para importar y distribuir el combustible.
Del año 2012 a 2016, año previo a la liberalización de los combustibles, la Magna y la Premium incrementaron un 29.32 por ciento y 30.25 por ciento, respectivamente.
A pesar de que el mercado gasolinero en México abrió sus puertas a la competencia y en los últimos cuatro años pasó del control del 100 por ciento de las gasolineras al 81.5 por ciento, los consumidores no han visto una mejora en sus bolsillos.
Además, con la liberalización de los precios de la gasolina la especulación es otro de los factores de riesgo para los usuarios, mientras que Petróleos Mexicanos (Pemex) sigue siendo la única proveedora y la principal operadora de infraestructura para importar y distribuir el combustible.
En entrevista para EconomíaHoy.mx, José Carlos Femat Romero, director general de la Organización Nacional de Expendedores de Petróleo (Onexpo) indicó que “es muy difícil decir qué es lo que está pasando en aquellas estaciones de servicio que han estado subiendo los precios semana con semana o incluso algunos día con día, no es la mayoría pero de cualquier forma ellos tienen que informar estos precios a la Comisión Reguladora. Los precios sí van a cambiar pero lo harán de manera paulatina, al final de cuentas será el mercado el que castigue a aquellas empresas que injustificadamente aumenten sus precios”, advirtió.
Explicó que la Comisión Reguladora de Energía (CRE) y la Comisión Federal de Competencia (Cofece) van a estar al pendiente de que los precios no suban de manera desordenada o de que un grupo empresarial no suba los pecios de una forma que no vaya paralela a las condiciones de competencia, o que en una región suban también los precios, “puedes subir o bajar los precios para entrar en este ámbito de competencia, siempre y cuando se haga de una manera justificada, es un proceso nuevo que estamos aprendiendo”.
En lo que se refiere a la liberalización de los precios de la gasolina Femat Romero comentó: “es un proceso completamente nuevo, incluso había muchos empresarios gasolineros pertenecientes a Onexpo que se nos acercaban a preguntarnos qué precio pongo. Para nosotros ha sido complicado porque implica dejar de pensar que dependíamos completamente de Pemex para tomar decisiones y ahora tenemos frente a nosotros un abanico de posibilidades”.
MÁS MARCAS, UN SOLO PRODUCTO
“A pesar de la apertura comercial Pemex sigue siendo el monopolio de la distribución, si bien se han desarrollado temporadas abiertas y licitaciones para que se tenga competencia en el sector de transporte de hidrocarburos y almacenamiento de los mismos, no ha habido inversiones privadas que pasen más allá de los permisos que otorga la CRE”, afirmó Alejandro Limón Portillo especialista en temas de Energía y Finanzas públicas del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP).
Los nuevos competidores están apostando por dar un valor agregado al producto que ofrecen, pero éste es limitado ya que el distribuidor seguirá siendo Pemex. Lo que ofrecen actualmente son aditivos que mejorarán la calidad del producto y la implementación de nuevos servicios que marquen la diferencia como pagos a través de plataformas electrónicas, mientras siguen explorando formas de importar el combustible.
Actualmente hay 33 empresas, nacionales y extranjeras, petroleras como BP, Shell, Exxon-Mobil, Total, Gulf, Hidrosina, Oxxo Gas, entre muchas otras, se han abierto paso en un mercado que es prácticamente virgen para el sector privado y se han sumado a la diversificación de la política de suministro en el país con cerca de 2 mil 200 estaciones de servicio, arrebatándole a la marca de la paraestatal mexicana alrededor del 20 por ciento del mercado de estaciones de servicio y la mayoría se concentra en el norte del país.
Las estaciones operadas por nuevas firmas, sólo cambiaron la marca ya que la estrategia de los nuevos competidores, hasta hoy, ha sido la adquisición de las estaciones anteriormente operadas por la franquicia de Pemex y sólo han cambiado su imagen.
Ninguna de las nuevas marcas vende gasolina propia, por lo que la competencia consiste en la prestación de nuevos servicios y en la presencia de aditivos en el combustible. Por lo que Femat Romero indicó que los gasolineros tendrán que ofrecer un valor agregado para generar fidelidad y preferencia por parte de los consumidores.
UNA OPORTUNIDAD PARA GANAR CLIENTES
José Carlos Femat indicó que el 2018 será un año muy bueno para la competencia y para que los empresarios del sector implementen nuevas formas de atraer y mantener a sus clientes, indicó que es una oportunidad de convertirse en un mejor empresario y ganar más clientes.
“La apertura del mercado ha sido histórica. En términos de competencia se han sentado las bases para que los empresarios gasolineros nos pongamos las pilas para ofrecer a los usuarios finales un producto de calidad y servicios que anteriormente no se ofrecían”, afirmó.
Fuente: Sin Embargo