El presidente del Tribunal Superior de Justicia del DF, Edgar Elías Azar, indicó que el conflicto entre el ex ministro Genaro Góngora Pimentel y su ex pareja Ana María Orozco Castillo -iniciado por una demanda de pensión alimenticia presentada por ella, la cual dio un vuelco cuando él la acusó de fraude-, representa una disyuntiva entre el derecho penal y la justicia en el país.
Ex pareja de Góngora acepta sus disculpas desde la cárcel: "Acepto sus disculpas, me da gusto que reaccione favorablemente", dijo vía telefónica, desde Santa Martha Acatitla. No obstante, insistió en que existieron "irregularidades fuertes" de funcionarios públicos (jueces) que actuaron en su contra.
Lectura íntegra de la carta de Góngora Pimentel donde ofrece disculpas
El ex presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Genaro Góngora Pimentel, se defendió de las acusaciones de su ex pareja, Ana María Orozco Castillo, quien aseguró que el ex ministro utilizó su influencia con los jueces para encarcelarla el año pasado por un presunto fraude, luego de que ésta presentara una demanda de pensión alimenticia para sus 2 hijos, la cual impugnó.
En una carta enviada a la periodista Carmen Aristegui -la cual fue leída esta mañana- el ex ministro habló por primera vez del caso difundido en la primera emisión de Noticias MVS, sobre un presunto tráfico de influencias de Góngora para actuar contra la madre de sus hijos, David y Ulises, no sólo llevándola a la cárcel por la demanda de fraude, sino reclamando a los 2 menores, acusándola de maltrato.
“Reconozco que me dejé llevar por mis emociones de desconcierto”, indica, en referencia a una “situación que en ese momento mis hijos vivían al lado de su señora madre”.
Pero sostiene que jamás ha faltado a su deber de padre y siempre ha estado pendiente de las necesidades de sus hijos
No obstante, en la carta ofrece una disculpa a su ex pareja, familia e hijos, “si en algo les he fallado“.
Luego de ello, indica que apoyará a la autoridad ministerial “para que en el momento procesal oportuno, Ana María se reincorpore al hogar con nuestros hijos y les brinde toda la atención, el amor, el cariño y comprensión que ellos se merecen”.
“Dicen que las cosas pasan por algo y esta experiencia sin duda trajo enseñanzas para ambos padres, me refiero a Ana María y a mí. Es bueno examinar el pasado rubro por rubro, y no llorarse las mentiras sino contarse las verdades –como decía el gran Mario Benedetti”, comenta.
