viernes, 16 de noviembre de 2012

Comienza en San Lázaro la promoción para aprobar las iniciativas de Peña Nieto


La bancada priísta justifica que desaparezca la SSP y el trasladar su mando a Bucareli

Más que hacer grande a Gobernación se trata de pedirle resultados, señala Manlio Fabio Beltrones

El grupo parlamentario del PRI en la Cámara de Diputados presentó en la sesión de ayer la iniciativa que recibió del presidente electo, Enrique Peña Nieto, de reforma a la Ley Orgánica de la Administración Pública, que pretende desaparecer la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) y trasladar el mando de la policía y las tareas de seguridad interior a la Secretaría de Gobernación.

El coordinador parlamentario del tricolor en San Lázaro, Manlio Fabio Beltrones Rivera, detalló la razón política para modificar las instituciones del Estado: “Entiendo que el espíritu de una iniciativa de reformas a la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal, que desaparece algunas secretarías e incorpora estas funciones en otras (...) lleva el propósito de encontrar soluciones a muchos de los problemas que hoy vive el país.

“¿Quién no puede imaginar que sea necesario restructurar la administración pública federal, para lograr combatir la pobreza, la desigualdad, que los programas sociales lleguen de mejor manera? Y eso se intenta también en estos cambios a la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal. También en el tema de seguridad pública hoy se refuerza –como es la intención del presidente electo, Enrique Peña Nieto– a la Secretaría de Gobernación, a la que se le exigirán resultados.

–¿Existe riesgo de que den demasiada fuerza a la Secretaría de Gobernación?

–Busquemos resultados. Démosle al presidente electo esta reorganización de su administración pública y posteriormente veamos cómo alcanzamos los objetivos de darle paz social y tranquilidad a México.

–¿En qué plazo se desahogaría el procedimiento aprobatorio? –se le preguntó.

–Intentaríamos que fuera lo más pronto posible, y esto pensando en que deberíamos dictaminar a más tardar la próxima semana y aprobar la siguiente, para que la enviáramos de manera inmediata a la Cámara de Senadores, para que ahí también lleven a cabo la aprobación de la misma, y que el próximo gobierno del presidente Enrique Peña Nieto, a partir del primero de diciembre se encuentre ya con una nueva ley orgánica que le permita reorganizar al gobierno federal. Partimos de la base que a los gobiernos no hay que decirles cómo se organicen, por parte del Poder Legislativo, sino más bien exigirles resultados.

Y esperaría de los otros grupos que le obsequiaran esta aprobación y después de escuchar cuál es el espíritu que alienta estos cambios, lo aprobáramos. 

El presidente de la mesa directiva, Jesús Murillo Karam (PRI), detalló la relevancia de la iniciativa en cuestión: “Ese tipo de leyes lo que buscan es poner al Ejecutivo al día, en función del proyecto del propio Ejecutivo; sucede casi cada seis años y a veces hasta más veces en un sexenio. Si ustedes recuerdan, hace muy poco tiempo se promovió también una iniciativa para desaparecer algunas secretarías y el Senado consideró que no había condiciones.

Las que generalmente se aceptan, de manera casi automática, son las de principio de sexenio, porque es evidente que se trata de despejarle el camino al Ejecutivo, en la forma en que él pretenda constituirse como tal. Acuérdense que el Ejecutivo, en términos constitucionales, es responsabilidad del Presidente de la República y evidentemente él sabe cómo se organiza.

En tribuna, el encargado de presentar el proyecto fue el coordinador de los diputados priístas del estado de México, Jorge Manzur Quiroga, quien refirió que la iniciativa contempla asegurar una sólida coordinación intergubernamental, mejorar el esquema de seguridad interior y protección de los ciudadanos, imprimir un sentido integral a la política social y a la armonía al desarrollo territorial.

“Gobernación tendrá las atribuciones para encabezar las políticas públicas de seguridad interior, de prevención del delito, así como del sistema penitenciario federal, con la consecuente desaparición de la actual Secretaría de Seguridad Pública.

Con este reforzamiento se podrán coordinar de mejor manera las tareas de seguridad interior del país, con las labores de vigilancia fronteriza y migratoria, además de la especial para las zonas y centros de población que así lo requieran.




Fuente: La Jornada