viernes, 8 de junio de 2012

Representantes de PRI y PRD coincidieron en que hay que desechar la actual reforma laboral


Es necesario abandonar la ruta de la precarización por la que nos ha llevado el panismo

Enviados de los aspirantes abordaron qué políticas sobre el trabajo implementarían en la Presidencia

Por primera vez representantes del PRI y del PRD coincidieron en que la reforma laboral que se quedó congelada en la Cámara de Diputados tendrá que ser desechada totalmente e ir por una nueva, que no atente contra los derechos de los trabajadores, y concordaron en que dicha reforma por sí misma no va a generar empleo, ya que para ello se requiere incentivar el mercado interno.

En un foro en el que se analizaron las políticas laborales que implementarían los candidatos a la Presidencia de la República, organizado por el Instituto de Política Laboral, se dejó en claro que las reformas laborales propuestas por el PAN, primero, y luego por el PRI, serán retiradas, ya no van más.

El primero participante en este foro, Arturo Alcalde, comentó que en todos los rubros que competen a los trabajadores, como son empleo, salarios, libertad sindical, prestaciones, contratación colectiva y demás, en todos estamos mal, pues el tema laboral fue degradado por los gobiernos del PAN.

Al hablar sobre el proyecto laboral del candidato de las izquierdas, Andrés Manuel López Obrador, indicó que éste buscará poner énfasis en el cambio del modelo económico, y la agilización del mercado interno, como el camino para el crecimiento del empleo y la mejora paulatina de los salarios. Es decir, abandonar la ruta de la precarización por la que nos ha llevado el panismo, dijo.

La sorpresa fue que Jorge Carlos Ramírez Marín, vicecoordinador de la campaña del abanderado de la Coalición Compromiso por México, Enrique Peña Nieto, al tomar la palabra le dijo a Alcalde compartimos totalmente su tesis, ha sido un error la precarización, pues lo único que ha generado es mayor conflicto social.

Sostuvo que el PRI también se iría por el fortalecimiento de la economía como vía para generar empleo, y reconoció que la propuesta laboral del tricolor fue presentada de manera abrupta, sin antes tomar consenso.

Así, el representante del blanquiazul en esta mesa, Javier Salazar, ex secretario del Trabajo, se quedó solo defendiendo la referida iniciativa de reforma panista, dijo una vez más que ésta es necesaria y que sólo se le tendrían que incorporar algunos elementos como la regulación de la tercerización (outsourcing).

El ex funcionario y ahora diputado también tuvo que defender solo el planteamiento de que la reforma generaría empleo, porque Marín y Alcalde sostuvieron que es ilusorio esperar que la iniciativa per se cree los trabajos que requiere el país. También señaló que el PRI fue el que frenó la aprobación de la reforma propuesta por el mismo partido y la del PAN.




Fuente: La Jornada