Una comisión de trabajadores de la extinta LFC se reunió con el cardenal para pedirle que rece por la seguridad de sus compañeros que se mantienen en plantón en el Zócalo capitalino.
El dirigente del sindicato de Trabajadores Electricistas (SME), Martín Esparza, acordó vía telefónica sostener un encuentro, esta semana, con el cardenal Norberto Rivera Carrera, ante el temor de los electricistas de ser desalojados por la fuerza del Zócalo capitalino, debido a una serie de sucesos que los han puesto en alerta y ante la cercanía de la celebración del desfile en conmemoración de las fiestas patrias.
La conversación entre Rivera y Esparza se dio luego de que decenas de electricistas que laboraban en Luz y Fuerza del Centro (LFC) acudieron a la homilía dominical, al término de la cual se reunieron en privado con el Arzobispo Primado de México, encabezados por Fernando Muñoz Ponce, secretario tesorero del SME.
Posterior al encuentro, Muñoz relató en entrevista que pidieron al cardenal que rece por la “seguridad” de los electricistas, así como por que logren una mejoría en su situación económica-social, pues miles de ellos persisten en el desempleo y la situación de 22 mil jubilados del gremio es de total “incertidumbre”.
Los electricistas, dijo Muñoz, temen que el gobierno federal decida utilizar la fuerza para desalojarlos de la Plaza de la Constitución donde permanecen desde principios de año, luego de casi dos años de la liquidación de LFC.
El temor se fundamenta en el hecho de que desde la semana pasada y precisamente en las madrugadas, cuando todos duermen, elementos del Ejército Mexicano realizan recorridos alrededor del Zócalo, en tanquetas y otros vehículos militares, para después estacionarlos de frente hacia el campamento.
“Desde la semana pasada llegan en tanquetas y lo que hacen es detenerse y en una postura intimidante voltean hacia el campamento. La madrugada del sábado llegó también otro camión con elementos del Ejército e hicieron lo mismo. Aunque posteriormente se retiran”.
De parte de los electricistas, dijo, hemos mantenido la cordura.
-¿Ha habido algún mensaje, escrito, verbal o de otra naturaleza para pedirles que se retiren?
- Gobernación dice que continúa abierto al diálogo. Nosotros también estamos a la espera de que se vuelvan a dar las reuniones para dar solución al conflicto. Y aunque las mesas de negociación están instaladas, no se ha avanzado mucho. Se le sigue adeudando a los compañeros que no cobraron la liquidación (más de 16 mil); a quienes se les descontaba pensión alimenticia, y los jubilados están en la incertidumbre. Lamentablemente no hemos avanzado.
- ¿Se retirarán del Zócalo para que el gobierno federal lleve a cabo el desfile del 16 de septiembre?
- La asamblea mandató que aquí nos quedamos (en el Zócalo). Somos respetuosos de las decisiones de asamblea.
Muñoz refirió que existe un documento que “se firmó con el gobierno federal –el 25 de julio de 2010, cuando levantamos la huelga de hambre-, al cual no se ha dado cumplimiento. Necesitamos las respuestas concretas del gobierno federal”, para levantar el campamento.
Los electricistas ingresaron este mediodía a la Catedral Metropolitana en silencio y portando grandes mantas con la imagen de la Virgen de Guadalupe, arriba de la cuales se leía “Reina de México” y “Eres la luz y fuerza de los Electricistas”. También portaban la imagen de Cristo crucificado.
A la salida, los electricistas pidieron enviar un mensaje al gobierno de Felipe Calderón: “¿Señor presidente, no tiene remordimiento por lo que prometió a los mexicanos y no ha cumplido?”, dijeron en alusión al desempleo de ese gremio, el general y la situación de inseguridad que priva en el país, entre otros temas.
Fuente: La Jornada