Hollande y Peña firman acuerdo en Los Pinos.
Foto: Benjamin Flores
En un video y una carta publicados el viernes pasado, integrantes de la comunidad mexicana en París –en su mayoría estudiantes– muestran fotos de los 43 normalistas desaparecidos en Iguala y leen en francés una corta biografía de algunos de ellos; incluso algunos lo hacen con la cara pintada de calavera.
La petición retoma los puntos principales de una carta que enviaron varias organizaciones a Hollande para pedirle de manera oficial “reconsiderar” la invitación al presidente Peña Nieto.
En ella, el colectivo recuerda al mandatario francés la serie de “acontecimientos trágicos” que atravesó México desde que invitó a Peña Nieto a asistir a la fiesta nacional, tales como “los crímenes de Estado” perpetrados en Tlatlaya, Apatzingán e Iguala.
También rememora que el mandatario mexicano ordenó “la represión a los campesinos de la comunidad de Atenco” cuando era gobernador del Estado de México.
“Al no actuar para que la justicia mexicana cumpla plenamente su papel y al descalificar a los periodistas y organismos internacionales que critican la gestión de su gobierno, Enrique Peña Nieto se hace cómplice de quienes ordenan esos crímenes”, plantea la petición. Añade que “la sociedad civil mexicana no tiene otra opción que dirigirse a la comunidad internacional para reclamar justicia”.
Y sentencia: “El presidente Enrique Peña Nieto se ha mostrado insensible a las críticas y se niega a reconocer el deterioro de la situación de los derechos humanos en México”.
En abril de 2014, Francois Hollande realizó una visita de Estado en México, durante la cual reiteró, junto con Enrique Peña Nieto, un estrechamiento en la relación entre ambos países.
Así, los mandatarios dieron por terminada la crisis diplomática que generó el caso de Florence Cassez en las relaciones mexicano-francesas durante las administraciones de Nicolas Sarkozy y Felipe Calderón.
Para ilustrar la “nueva era” de las relaciones entre los dos países, Hollande condecoró a Enrique Peña Nieto con la Legión de Honor y le pidió asistir como invitado de honor a la conmemoración de la Toma de la Bastilla, el próximo 14 de julio de 2015.
Durante la visita, los mandatarios firmaron una treintena de acuerdos comerciales y bilaterales en rubros de aeronáutica, energía, salud y educación, entre otros.
En la carta enviada al presidente francés, los mexicanos inconformes aseguran que “los vínculos entre Francia y México no pueden estar supeditados exclusivamente a consideraciones de ‘diplomacia económica’”.
Y cierran al decir que “los honores reservados al señor Enrique Peña Nieto nos parecen ahora desafortunados y fuera de lugar”.
Fuente: Proceso| MATHIEU TOURLIERE
