domingo, 18 de marzo de 2012

Reparte SG entre asociaciones religiosas guía para el voto de feligreses en 2012

Los jerarcas de la Iglesia católica dicen que es un derecho difundir su catecismo

Gobernación tiene prohibido inmiscuirse en la vida de estos gremios, señala especialista

La Secretaría de Gobernación (SG) comenzó el reparto de una carta a las asociaciones religiosas con registro, para que promuevan entre sus feligreses la participación en las elecciones el primero de julio.

Según la dependencia, el llamado que deben hacer los ministros de culto desde el púlpito es sólo para acudir a las urnas y ejercer un sufragio libre, secreto y universal.

Hasta el momento la dependencia ha evadido emitir su opinión acerca de la guía con base en la cual la arquidiócesis de México dicta consideraciones para votar, supuestamente en congruencia con los preceptos católicos.

Los lineamientos que promueve la asociación van en contra de la misiva que desde este mes empezó a repartir el gobierno federal.

Como antes se difundió (La Jornada, 25 de febrero de 2012), Elio Masferrer, experto en religiones y profesor-investigador de la Escuela Nacional de Antropología e Historia, dijo que la instrucción de Gobernación es ilegal y ambigua, porque la Constitución prohíbe al Estado inmiscuirse en la vida de las asociaciones religiosas, y en ninguna parte de la Ley de Asociaciones Religiosas y Culto Público se ordena a las dependencias del Poder Ejecutivo dar indicaciones de ese tipo

Los funcionarios de Gobernación que fueron consultados aseguran que la carta de referencia constituye una medida preventiva ante las eventuales intenciones de las iglesias de transgredir la ley en este proceso electoral.

La misiva será entregada a 7 mil 688 asociaciones con registro en Gobernación, las cuales, a su vez, la deberán reproducir entre los 68 mil 516 ministros de culto que tienen estos grupos.

El artículo 29 de la Ley de Asociaciones Religiosas y Culto Público establece como causal de infracción asociarse con fines políticos, así como realizar proselitismo o propaganda de cualquier tipo en favor o en contra de candidato, partido o asociación política algunos.

Jerarcas de la Iglesia católica consideran que es su derecho difundir su catecismo; por ejemplo, insisten en pedir a sus feligreses que no voten por opciones que van contra los lineamientos de esta asociación religiosa, tales como la defensa de la vida desde la concepción hasta la muerte natural.

Emilio Berlié, arzobispo de Yucatán, dijo que todas estas acciones deben hacerse con respeto, porque hay un Instituto Federal Electoral sumamente trabajador que está marcando las pautas; además, evitar las descalificaciones y, en cambio, buscar las propuestas de los candidatos y no los chismes.

Sin embargo, defendió también el derecho de promover sus principios: Yo digo que voten por lo que está aceptado en el catecismo de la Iglesia católica, el cual tiene vigencia para mil 200 millones de católicos que viven en 216 países. Voten por lo que esté de acuerdo con el catecismo de la Iglesia católica, dijo.

–¿No se infringen con ello los principios de voto libre y secreto?

–No, estos señores saben que, por derecho, lo que está en nuestro catecismo tenemos derecho a propagarlo; es un derecho que me concede la propia Secretaría de Gobernación.




Fuente: La Jornada