Integrantes del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) formaron ayer una cruz humana en la plancha del Zócalo, con el fin de llamar la atención del papa Benedicto XVI sobre el hecho de que 44 mil trabajadores fueron despedidos por el gobierno de Felipe Calderón, y pedir su intervención para lograr una solución justa a esta problemática.
José Humberto Montes de Oca, secretario del exterior del SME, resaltó que tras la extinción de Luz y Fuerza del Centro y el despido de los 44 mil empleados, los que optaron por la liquidación y creyeron en las promesas de reinserción laboral no han logrado incorporarse al mercado de trabajo, debido a que los programas gubernamentales al respecto fueron un engaño, y a que, debido a la injusta campaña publicitaria que orquestó el gobierno en su contra, los electricistas son objeto de discriminación.
Fuente: La Jornada