martes, 30 de octubre de 2012

Sería procedente un amparo contra la subcontratación, admite aspirante a la SCJN


Comparecen en el Senado los seis candidatos a integrarse a la Suprema Corte

Ministros destacan que volverían a dictar la sentencia contra El Chapo y la liberación de Raúl Salinas


Al comparecer ante la Comisión de Justicia del Senado como integrante de la terna para sustituir al ministro Sergio Salvador Aguirre Anguiano, el magistrado Pablo Vicente Monroy Gómez aseveró, a pregunta expresa del senador Manuel Camacho Solís, de “si volvería a juzgar a Joaquín El Chapo Guzmán como hace 20 años: desde luego, porque un juez está obligado a ser congruente y consistente.

Destacó que cualquier juez tiene que ser una persona que haga de la aplicación de la ley su opción de vida con las consecuencias que esto traiga. Si son desafortunadas para la persona o para su familia, mejor optar por no ser ya más juez. Si uno está en la investidura judicial, se tiene que sostener, pese a las consecuencias que pueda haber. Si un juez no dicta la sentencia que deba dictar por temor, mejor que renuncie antes que dictar una sentencia indebida o torcida, respondió el magistrado Monroy.

El panista Javier Lozano pidió su opinión sobre las relaciones laborales que existen en una paraestatal cuando ésta desaparece por algún acto jurídico válido.

El magistrado respondió al panista: Me está preguntando directamente por el sindicato de electricistas, ¿verdad? ¿Posiblemente Luz y Fuerza? Soy laborista, fui litigante en materia laboral. Ahí tendría que cuidar mucho la parte de los derechos legítimos de los trabajadores, la parte de la constitucionalidad de sus derechos laborales con la decisión que se tomó de cerrar la paraestatal.

El siguiente en la lista de la terna en comparecer fue el magistrado Gelacio Pérez Dayán. El priísta Miguel Romo lo cuestionó sobre el aborto y la adopción por parejas del mismo sexo. El magistrado sostuvo: Soy un ferviente defensor de la vida, como creo lo debe ser todo demócrata. No dejo de reconocer circunstancias que la sociedad enfrenta en cuanto a este tipo de fenómenos que llevan a cada una de las personas a tomar decisiones diferentes o contrarias y estos lineamientos de vida. Creo que el legislador consciente de la responsabilidad que supone encontrar las causas y responder a ellas a través de las leyes ha legislado para despenalizar este tipo de circunstancias, en ejercicio de la soberanía que le da la Constitución a cada una de las entidades federativas.

En su oportunidad, la magistrada Andrea Zambrano fue cuestionada por el senador Camacho Solís respecto a la autorización del arraigo y los testigos protegidos. Hoy por hoy el arraigo nos plantea un problema de política, me atrevería a decir legislativa, porque hay varios tratados internacionales que lo declaran violatorio de derechos humanos y, aunque en este país sigue considerándose una medida precautoria, no me queda claro el tener a una persona secuestrada en lo que la investigación se lleva a cabo. Esta figura tendría que llamarnos a un debate como sociedad para saber si debe acotarse, permanecer o respetarse a rajatabla lo que dicen los tratados. Hasta donde yo sé y en el seno del Poder Judicial hay una gran problemática por la que hablábamos de la impunidad.

Por la tarde compareció la terna para sustituir al ministro Guillermo Ortiz Mayagoitia. El primer examinado fue el magistrado Manuel Maraiba. Fue cuestionado por la senadora del PRD Dolores Padierna por emitir su fallo en favor de la liberación de Raúl Salinas de Gortari y su relación con el salinismo.

El magistrado respondió a la senadora: Cuando resuelvo no veo nombres ni me importan las investiduras con las que me enfrento. Esta resolución que dicté la volvería a emitir, porque no existieron las pruebas suficientes.

El senador Manuel Camacho Solís le cuestionó el proceso al obispo Onésimo Cepeda por una acusación de fraude por 130 millones de pesos.

–¿Hubo algún interés por el que usted decidió en favor del obispo?

–Insisto, lo que he hecho, lo que hago y lo que hice, lo volvería a hacer en mis pronunciamientos, sin ninguna duda.

Por su parte, la magistrada Emma Meza Fonseca, al ser cuestionada sobre la adopción entre matrimonios de personas del mismo sexo respondió: Estoy plenamente de acuerdo con que los matrimonios del mismo sexo puedan adoptar. Jurídicamente y constitucionalmente está claro. En su exposición la magistrada se pronunció en favor de los derechos humanos.

Insistentemente fue cuestionada respecto a si en su consideración los tratados internacionales están por encima de la Constitución, sobre todo en materia de derechos humanos, y la magistrada sostuvo: Sí, si los tratados tienen mayor protección. Un primer parámetro es aplicar la Constitución, pero una segunda opción son los tratados internacionales si tienen mayor protección.

La última magistrada compareciente fue Rosa María Temblador. El petista David Monreal la cuestionó, con un ejemplo hipotético, si es procedente el amparo en contra de la reforma laboral. La magistrada respondió: todavía no se aprueba, pero usted puso un ejemplo de subcontratacion, de desigualdad en el empleo, que un trabajador está en desventaja porque no le pagan prestaciones conforme a la ley. Sí sería procedente el amparo.

La magistrada se pronunció en favor del derecho a la vida conforme a lo que sostiene la Convención Interamericana de los Derechos Humanos: la vida empieza desde la concepción.

Casi para concluir la comparecencia de la magistrada Temblador Vidrio, el senador priísta Omar Fayad le pidió que explicara el procedimiento de cómo llegó a la terna. Ella aseveró: me enteré por la prensa: yo infiero que entrevistaron a los ministros, pero también que dos ejecutivos se pusieron de acuerdo para la conformación de estas dos ternas.




Fuente: La Jornada