Tarifas medias en México son 20% más caras que en EU y las industriales 60% más altas.
Ante las altas tarifas eléctricas que impactan los costos de producción agrícola y precios de alimentos, la Central Campesina Independiente (CCI) propuso revisar los subsidios y dar mayores beneficios a los pequeños productores, además de que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) se comprometa a proveer un servicio más eficiente y a mejores precios.
De acuerdo a estimaciones del Banco de México, las tarifas medias en México son alrededor de 20 por ciento más caras que en Estados Unidos y en el caso de las tarifas industriales son 60 por ciento más caras que en ese país.
Para el sector agropecuario el uso de la energía eléctrica representa la posibilidad de generar producción a partir de la posibilidad de extraer agua subterránea y transformar, beneficiar, empacar, almacenar y conservar los productos del campo, agregando valor y ampliando las posibilidades de comercializarlos.
En conferencia, el presidente de la CCI, Rafael Galindo Jaime, destacó que la revisión de las tarifas eléctricas por parte de la CFE es de vital importancia, debido a que México es un país deficitario en cerca del 50 por ciento del total de alimentos que se consumen, mientras que los que están al alcance son caros y de mala calidad.
Por ello, consideró, es urgente que la CFE y las dependencias del Ejecutivo federal que tienen competencia en este asunto, se comprometan con la sociedad para proveer un servicio más eficiente y a mejores precios.
Galindo Jaime anunció que la CCI se sumará a los trabajos de la Cámara de Diputados para promover cambios en las tarifas del servicio eléctrico con el fin de atenuar el costo de la vida, sobre todo de la población en condiciones de pobreza pero también para promover el desarrollo productivo del sector agropecuario.
Propuso rediseñar las tarifas eléctricas en función del cambio de patrones de comportamiento del clima en distintas regiones del país, y en función de los niveles de consumo, ampliando los márgenes actuales que resultan muy limitados en cuanto al consumo promedio de la población más pobre.
Incluso, señaló la conveniencia de que la CFE, la Comisión Nacional del Agua y la Secretaría de Agricultura diseñen y pongan en operación un programa de renovación de equipo de bombeo para la extracción y uso de agua para riego agrícola, sugirió.
Fuente: La Jornada