sábado, 21 de septiembre de 2013

Empleados de Pemex defienden su empleo ante la llegada de empresas extranjeras a la paraestatal

Ni siquiera esperaron a presentar la iniciativa de reforma petrolera ante el Congreso, en septiembre. El gobierno de Peña Nieto tenía prisa. Y es que, a pesar de la insistencia del PRI y el PAN de que Pemex "no se privatiza, se moderniza", y de que no se vendería "ni un tornillo" de la paraestatal, lo cierto es que este miércoles 31 de julio comenzó formalmente la venta de los activos petroleros propiedad de la nación. Empezó el remate.

De manera furtiva, a escondidas, se publicó en el Diario Oficial de la Federación el Acuerdo de la Secretaría de la Función Pública por el que se desincorpora al Complejo Petroquímico Pajaritos del dominio público de la Federación, a fin de que sea vendido por Petróleos Mexicanos, a través de la subsidiaria Pemex Petroquímica.

El texto del acuerdo deja claro que lo que Pemex está vendiendo no son "tornillos": es ni más ni menos que todo un complejo petroquímico plenamente operativo y en producción. El citado acuerdo menciona cuál es el objeto de la desincorporación: 

Un inmueble e instalaciones industriales a él adheridas, con una superficie de 476,386.00 metros cuadrados, localizado en el Municipio de Coatzacoalcos, Estado de Veracruz, a efecto de que el organismo público descentralizado Pemex-Petroquímica lleve a cabo su enajenación a título oneroso

O sea, no sólo se vende el terreno, sino todas las instalaciones, plantas, maquinaria y equipos industriales que se encuentran actualmente en él, y que son (eran) propiedad de Petróleos Mexicanos. Privatización en serio. 

Para entender la magnitud de este atraco a la nación, conviene ubicar geográficamente dichas instalaciones. Ubicado en el municipio de Coatzacoalcos, Pajaritos forma parte del corredor petroquímico del sur de Veracruz, junto con La Cangrejera y Morelos; y al lado de otras empresas petroquímicas de propiedad privada. Tiene una superficie total de 990,528 metros cuadrados, de la cual Pemex pretende vender prácticamente la mitad. El complejo comenzó a operar el 18 de marzo de 1967 y entre los productos que fabrica se encuentran el etileno, ácido muriático, ácido clorhídrico, y "la joya de la corona": cloruro de vinilo, un compuesto utilizado en la fabricación de PVC.