viernes, 11 de mayo de 2012

Josefina declina Insuficiencia exhibida. IFE, error original. Riesgo para paisanos

Menguante es la condición política de Josefina Vázquez Mota. Se multiplican las voces que (incluso en su propia cara) le advierten no solamente de fallas y carencias sino, sobre todo, de desmotivación y vacuidad. Abandonada por la pareja de Los Pinos que le da apoyo escenográfico pero pareciera tener la vista en otras opciones (una de ellas, muy presente, la del cambio de candidata), engañada con presuntos golpes de timón y la tragicómica nomenclatura de la jefa, vista en picada por el presidente formal del PAN, Gustavo Madero, que prefirió regresar al Senado, y por Francisco Ramírez Acuña, que aprovechó para irse a España de embajador semestral, la mujer de la falsa sonrisa eterna nomás no levanta, en términos electorales.

Su decaimiento imparable fue remarcado de manera implacable al inaugurar la noche del miércoles la serie de entrevistas con candidatos presidenciales a cargo de los integrantes de Tercer Grado, el programa dedicado usualmente al análisis político desde la lente de Televisa y sus aliados de Milenio. Aferrada a la declamación de frases voluntaristas y lugares comunes, Vázquez Mota fue arrollada por las preguntas, las consideraciones e incluso los gestos y actitudes de varios de sus anfitriones (algunos de ellos parecían expresar desaprobación, desdén, aburrimiento y algo parecido a la chanza, interrumpiéndola en ocasiones y mostrando poca aplicación en dejarla desarrollar algunas de sus rutinas insustanciales). Tales posturas de los entrevistadores serán de gran utilidad para calar a los candidatos más allá de sus discursos formales o los debates acartonados, pero deberán esmerarse en mostrar la misma actitud no sólo frente a los siguientes invitados (AMLO y Quadri) sino, en especial, frente a Enrique Peña Nieto, cuya sombra e intereses estuvieron presentes en algunas de las intervenciones de los periodistas televisivos, cual si de una celada contra la panista se tratara, y a quien se considera el gallo de Televisa en el palenque mediático.

Ciertamente, la campaña y la figura de Josefina están en declive y se multiplican las especulaciones sobre su posible relevo (en Los Pinos brindarían con un coctel Margarita), e incluso algunos con gran imaginación la exhortan a declinar personalmente, aunque el PAN nombrara a otra aspirante, en favor de López Obrador. Y, sin embargo... ella dice que sigue...

En otro asunto: aun cuando será hasta el 20 del corriente mes cuando venza el plazo para la entrega de paquetes electorales a mexicanos en el extranjero, hay preocupación en muchos de quienes hicieron trámites desde meses atrás y no solamente no han recibido el material, sino que tampoco han tenido respuesta de parte de las instancias del IFE para la atención de esos casos. La demostración, hecha ayer aquí, de los enredos postales, las boletas sueltas y los arreglos a la mexicana que permitirán a algunos votar con las papeletas originalmente destinadas a otros, añade nerviosismo y protesta entre quienes temen que lo visible hoy en hechos menores pueda ser un adelanto de irregularidades mayores.

Peores son las perspectivas si se toma en cuenta que el inicio del trámite para votar desde el extranjero estuvo viciado por un error básico, pues en el material descargable de Internet para imprimir el sobre de presunto porte pagado a México se incluyó en un recuadro, donde usualmente iría una estampilla postal, la leyenda No stamp required, sin un código especial o algún respaldo técnico que sustentara el franqueo. Maximiliano Preciado así relata lo vivido por él y Fernando Torres: “En enero fuimos a las oficinas de correo postal argentino en Buenos Aires. Cuando llegamos al lugar, el chico que nos atendió nos dijo: ‘Falta el timbre’. Nosotros le dijimos que el timbre no era necesario porque el gobierno lo había pagado, que eso es lo que decía el sello. Nos dijo que no. Recalcó preguntándonos: ‘¿Sabes cuántos sobres de éstos tenemos acá y lamentablemente no podrán viajar a México? Muchos’. No quisimos correr riesgos y pagamos diez pesos argentinos. Más o menos 35 de México. Por eso no hubo problema, ya que perder el voto, para nosotros, es un lujo que no nos podemos dar”.

Preciado y Torres inmediatamente escribieron al IFE a través de la página institucional en Facebook: “Hicimos un jpg para pegarlo en el muro de FB. Les comentamos lo que nos habían dicho. Su respuesta fue lo que más nos llamó la atención: ‘Lamentamos que hayan tenido que pagar’. Nosotros contestamos que no importaba el dinero, sino que mucha gente que vive en el extranjero se quedaría sin votar porque el sobre no tenía timbre. Jamás nos contestaron nada. Empezamos a revisar las fotos de mexicanos en el extranjero del perfil de Facebook de Voto Mexicano. Notamos que la mayoría de las fotos que aparecen son de chicos metiendo su sobre (sin timbre) en los buzones en las calles de distintas ciudades. También nos llamó la atención que otros que salían en fotografías con su sobre sí tenían timbre y hasta un envoltorio tipo DHL. Pensamos que quizás a ellos les dijeron lo mismo que a nosotros, pero no dijeron nada más o no alertaron a los paisanos en redes sociales”

Agrega Maximiliano: Al registrarte y hacer el trámite podías darle seguimiento a tu paquete. El domingo pasado nos juntamos a ver el debate unos compatriotas y yo. Al momento de preguntar por los paquetes, varios me dijeron que entraron a registrarlos a la red y les decía que no habían llegado a México. Estamos en mayo y los sobres los mandamos desde antes del 15 de enero. El mío, por ejemplo, no ha llegado, y lo mandé en tiempo y forma. No sé qué pasará. Acá estamos hartos de los malos manejos y la desorganización del Instituto Federal Electoral. No queremos pensar mal, pero lamentablemente muchos se quedarán sin votar y ellos no moverán ni un pinche dedo (en www.astillero.tv están las imágenes del sobre con el recuadro que supuestamente no requeriría timbre, y las imágenes de mexicanos depositando en buzones su solicitud de trámite que probablemente no habrá llegado a México).

Y, mientras sir Paul McCartney mueve masas alegres, ¡feliz fin de semana!




Fuente: La Jornada