miércoles, 5 de octubre de 2011

EU solapó tráfico de armas a México desde 2006

Previo a la fallida operación Rápido y Furioso, la ATF desarrolló otra, llamada Receptor Abierto, también en Arizona; piden investigar .

Estados Unidos solapó el tráfico de armas hacia México desde 2006, por lo menos.
Antes de que la Oficina de Alcohol, Tabaco y Armas de Fuego (ATF) desarrollara la fallida operación Rápido y Furioso desde Phoenix, había hecho la de Receptor Abierto desde Tucson, en 2006 y 2007.
En Receptor Abierto, los agentes de la ATF colocaron rastreadores electrónicos en las armas, pero igual que en Rápido y Furioso, los compradores recurrieron a un esquema simple: guardar las armas hasta que se acabaron las baterías, que duraban 48 horas.
Este programa permitió que alrededor de 500 armas de alto poder se vendieran sin control y presumiblemente llegaran a criminales.
En tanto, el representante republicano Lamar Smith pidió nombrar a un fiscal especial que investigue si el procurador Eric Holder mintió al Congreso cuando declaró que apenas se enteró este año de Rápido y Furioso.

Ventilan otro operativo fallido; dejan pasar 500 armas a México desde Tucson
Antes que la Oficina de Alcohol, Tabaco y Armas de Fuego (ATF, por sus siglas en inglés) desarrollara la fallida operación Rápido y Furioso desde su oficina de Phoenix, había hecho otra denominada Receptor Abierto (Wide Receiver), desde Tucson, pero en vez de dos mil, “sólo” permitió el paso de unas 500 armas.
El operativo tuvo lugar en los años 2006 y 2007, bajo el gobierno de George W. Bush y el Departamento de Justicia estaba a cargo del procurador general Alberto Gonzales.
De acuerdo con el senador republicano Charles Grassley, lo que es claro por ahora es que, se trate de Rápido y Furioso o de Receptor Abierto, se permitió que las armas “caminaran” y que funcionarios del Departamento de Justicia estaban al tanto de ellas. “No hay excusas”, dijo.
Receptor Abierto fue revisado en 2009 para la posibilidad de plantear acusaciones, cuando los nuevos funcionarios —llegados con el presidente Barack Obama— se enteraron de que la ATF “había permitido que armas fueran transferidas a sospechosos de tráfico de armas y no los habían interceptado”, de acuerdo con fuentes del Departamento de Justicia citados por medios estadunidenses.
En ambas operaciones aparecen los nombres de George Gillett y William Newell como agentes a cargo o participantes, según activistas por el derecho a portar armas. Newell, que fue nombrado agregado de la ATF a la embajada estadunidense en México, fue relevado antes de ocupar la posición.
En el operativo Receptor Abierto, los agentes de la ATF a cargo colocaron aparatos de rastreo electrónico en las armas, pero al igual que en Rápido y Furioso, los compradores recurrieron a lo que se describió como un esquema simple: almacenar las armas hasta que las baterías murieron. De acuerdo con un reporte, las baterías tenían una vida útil de 48 horas.
Otras tácticas
Los traficantes recurrieron también a la táctica de poner las armas en vehículos y manejar en círculos por horas hasta que los aviones no tripulados usados para seguir las señales debían aterrizar para recargar combustible mientras ellos, en el ínterin, cruzaban la frontera.
Una descripción precisó que los emisores de señales eran relativamente grandes para las armas donde fueron colocados, lo que obligó a doblar su antena y por tanto reducir el alcance efectivo de su señal.
De acuerdo con fuentes citadas por la prensa estadunidense, el operativo en sí costó “millones de dólares” en recursos y horas de vigilancia, sin que haya habido más resultados un par de acusaciones por incluir información impropia en los formatos para la compra de armas.
Piden indagar al procurador Eric Holder “por mentir”
El republicano Lamar Smith, presidente del Comité Judicial de la Cámara baja, pidió ayer el nombramiento de un fiscal especial que investigue si el procurador general de Justicia Eric Holder mintió al Congreso cuando declaró que se enteró este año de la fallida operación Rápido y Furioso.
Holder indicó el 3 de mayo, ante el Comité que preside Smith, que se había enterado del operativo “durante las últimas semanas” y que no había tenido conocimiento previo sobre el mismo.
Fuentes del Departamento de Justicia afirmaron, sin embargo, que Holder se refería a las tácticas usadas por la Oficina de Alcohol, Tabaco y Armas de Fuego (ATF) y no ignoraba al operativo mismo.
Contra las afirmaciones de Holder, un memorando de julio de 2010 consigna que el director del Centro Nacional de Inteligencia sobre Drogas, Michael Walther, le informó que los “compradores de paja” participantes en Rápido y Furioso eran responsables por la adquisición de más de mil 500 armas entregadas a los cárteles mexicanos de las drogas.
Otro memorando, del subprocurador Lanny Breuer, mencionó también que Rápido y Furioso el 18 de octubre de 2010.
El senador republicano Charles Grassley anotó a su vez que aunque Holder dijera la verdad, debió enterarse a más tardar el 31 de enero de este año, cuando él mismo visitó al procurador para entregarle una carta en la que reclamaba información sobre Rápido y Furioso. El mismo legislador estimó que Holder debió estar al tanto del programa a mediados de 2010 “o antes”.
En su carta a Obama, Smith afirmó que Holder comenzó a recibir información sobre el operativo desde el 5 de julio de 2010. Esas actualizaciones mencionaban tanto el nombre de la operación como detalles sobre las armas que llegaban a México.
La aparente contradicción es la base para que Smith
y otros republicanos demanden la designación de un fiscal especial, no tanto sobre la operación, que ya está bajo pesquisas del Inspector General del propio Departamento de Justicia y del Comité de Supervisión y Reforma Gubernamental de la Cámara de Representantes, sino en torno al propio Holder.
Smith consideró que Holder no puede investigarse a sí mismo.
Políticamente, sin embargo, es un golpe para el gobierno de Obama, que podría llegar a las elecciones de 2012 con investigaciones judiciales en contra, o bien verse obligado a prescindir de Holder, un importante aliado.




Fuente: Excélsior